lunes, 15 de agosto de 2011

La Segunda Parte





Hey aventureros! Hoy comparto la segunda parte de la historia del personaje misterioso, esta servidora.

Los que leyeron la primera parte, recordarán que mencioné que publiqué un reto en Facebook para que alguien me entrevistara. Una de las aventureras que aceptó fue mi prima, Saraí Ruiz, que pronto visitará el blog. Esta es la entrevista que ella me hizo. Me encantaron las preguntas, que son muy originales; tanto, que algunas ya las estoy utilizando en mis entrevistas.

Sigan descubriendo a Jac…

Saraí: ¿De qué color es tu vida?

Jac: ¡De mil colores! Voy desde el blanco hasta el negro, y todo lo que hay en el medio. Los colores son como las emociones; hay uno para todo.

Saraí: ¿Cómo nace la idea de las Aventuras de Jac?

Jac: Durante un tiempo fui Reportera, y tuve la magnífica oportunidad de cubrir eventos tales como conciertos, desfiles de moda y concursos de belleza. De eso, tengo muchas anécdotas y fotos. El año pasado, encontré algunas de esas fotos, y empecé a escanearlas para hacer un álbum en mi perfil de Facebook. Se me ocurrió nombrar el álbum “Aventuras de Jac”, y ese nombre se quedó en mi mente. Jac es un apodo que me dio una compañera de trabajo, y me encanta. Cuando decidí empezar el blog, supe que ese tenía que ser el nombre, pues en el mismo cuento mis aventuras y experiencias y las historias de otros.

Saraí: ¿El día o la noche?

Jac: ¡El día y la noche! Amo las mañanas; siempre me levanto activada, para hacer un montón de cosas. La noche tiene lo suyo también, pues es mágica y nos inspira.

Saraí: Cuéntame la anécdota más padre (nítida) de tus visitas a México...

Jac: Lo que más disfrutaba era compartir con ustedes, mis primos, pues siempre tenía algo que aprender de cada uno. México es hermoso y me encanta, desde la capital hasta el pueblito donde viven tus padres, Tecpan de Galeana. Pero, el sitio que más me gustó fue Taxco, pues se parece al Viejo San Juan con sus adoquines y callejones.

Saraí: ¿Qué te puede hacer llorar?

Jac: Yo soy muy sensible, y no me avergüenza aceptarlo. Me puedo emocionar con una película, una canción, lo que sea que me toque. Lo que más me hace llorar, pero de felicidad, son los logros de mis hijos, que tanto amo. El semestre escolar pasado, cuando mi hijo mayor entró en el cuadro de honor, no podía parar de llorar, de la emoción y el orgullo; fue un momento muy emotivo.

Saraí: ¿Qué es lo mejor de tener en tus venas sangre de dos nacionalidades?

Jac: Que he tenido el privilegio de conocer dos países, dos culturas, dos tradiciones y costumbres. Gracias a eso, he tenido la oportunidad de viajar a México en muchas ocasiones, y me encanta. Me siento muy orgullosa de mis raíces, y quiero que mis hijos las conozcan también.

Saraí: Si tuvieras una varita mágica, ¿qué cambiarías de tu vida?

Jac: Creo que todo pasa por una razón, y de lo bueno y lo malo aprendemos. Pero, si tuviera la varita, haría que mi papá viviera, para que pueda conocer a mi hijo menor. También me gustaría estar mejor económicamente, para darle lo mejor a mis hijos, y para poder ayudar más a otros.

Saraí: ¿Qué has aprendido en tu labor altruista (comunitaria)?

Jac: Que dar llena mucho más que recibir. Siempre digo: si no puedes donar dinero, haz como yo, y dona tiempo, servicios, sangre, pelo; ¡lo que puedas! No hay excusa para no ayudar. Todos debemos aportar de lo que tenemos, pues no sabemos cuándo seremos nosotros los que necesitemos.

Ser voluntaria de varias causas es algo que disfruto mucho. Siempre estoy buscando organizaciones y personas que necesitan, y ahora utilizo el blog como herramienta para ayudarles.

Saraí: Sabemos que ser madre cambia la vida de cualquier mujer; para ti, ¿qué ha significado?

Jac: Como dice la publicidad de unos pañales: “Vida de padres, caóticamente hermosa.” Aunque cambian tus planes y prioridades, es la obra más grande que podemos hacer, y nos satisface como ninguna otra cosa. Mis pollos (como yo les digo a mis hijos) son mi mejor poema, mi mejor creación. Son mis dos hermosas y poderosas razones para levantarme cada día. Gracias a ellos, estoy viviendo la aventura más grande, la de ser madre.

Saraí: ¿Y a ti, qué te mueve?

Jac: Me mueven las ideas que siempre tengo, los poemas que van surgiendo en cada momento. Me mueven las historias, las canciones, las películas. Lo que más me mueve son las personas, desde mi familia hasta el desconocido que ayudo a través de mi trabajo voluntario.

Muchas gracias, prima, por la entrevista. Chicos, si yo puedo, ustedes pueden también. Anímense a compartir su historia; siempre habrá alguien que quiera escucharla.

Esta entrada es dedicada a ustedes, aventureros, que me animan y me hacen el día con sus comentarios y apoyo. Gracias.